No me alcanzará la vida para agradecerle lo que me enseñó este año que se va….
Miles de segundos llenos de sabiduría aprendida entre la incertidumbre, el miedo y la valentía.
Una verdadera escuela intensiva que a marchas forzadas nos enseñó que si se puede soñar y seguir adelante aún cuando todos te dicen que se está acabando el mundo…
El mundo no se acabó, aquí estamos con mascarillas, pero dándole la cara a la vida y más fuertes y resilientes que nunca.
Dios no se equivoca y por algo nos toco vivir esta época, preguntémonos para que en lugar de porque ….
Sigo creyendo que las familias, los amigos, las empresas y todos los sectores están urgidos de liderazgos y estos brillan y urgen en los momentos más complicados de la existencia.
A mis queridos amigos y familia los motivo a ser esa influencia positiva que le dice a sus entornos qué hay mucho porque soñar y luchar. Que hoy debemos brindar y recordar a los que se han ido y en honor a ellos vivir …Vivir con todas las ganas y luchar como fieras por nuestros sueños, que nadie nos los quite, ni mil coronavirus…
Porque somos más fuertes que el año pasado y más humanos que nunca, pero ala vez más dispuestos a todo por sobrevivir y seguir adelante …
Llenemos nuestros corazones de optimismo
Agradezcamos a Dios. ¡¡Descansemos unas horas y sigamos con coraje hacía adelante!!
¡Qué se venga el 2021!
¡¡Qué lo estamos esperando!!
Manolo Marroquín
Empredegua